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El nuevo buque insignia Open Arms Uno zarpa en su primera misión humanitaria
Tras ocho meses de obstáculos administrativos y una minuciosa puesta a punto, por fin, el nuevo buque insignia de la organización, el Open Arms Uno, consiguió zarpar el día 9 de agosto del puerto de Barcelona rumbo a las aguas internacionales del Mediterráneo central, la fosa común más grande del mundo. En su primera misión humanitaria se encontrará con nuestro velero Astral, que ya ha puesto a salvo a más de 100 personas en los últimos días en una misión de vigilancia, asistencia y denuncia.
El Open Arms Uno, construido en Noruega en el año 2000 y cedido en 2021 por Enrique Piñeyro, presidente de la organización Solidaire, piloto y filántropo argentino colaborador de Open Arms, cuenta con un equipo adaptado y especializado para realizar sus tareas de rescate en las aguas del Mediterráneo:
- 66 metros de eslora y 15 metros de manga
- Un tonelaje cuatro veces superior al del viejo remolcador Open Arms
- Cubierta de 353 metros cuadrados que se convierte en un helipuerto para emergencias
- 4 lanchas semirrígidas de rescate
- Aforo de 300 personas, ampliable al millar
- Hospital con 26 camas, 2 habilitadas como UCI
- 31 plazas para la tripulación de la misión
Con todo este equipamiento, el barco se dirige a una zona en la que más de 1.000 personas han perdido la vida en lo que va de año según datos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y más de 15.000 han sido localizadas a la deriva en el último mes.
Tanto el Open Arms Uno como el velero Astral nos permitirán cumplir con nuestro compromiso más esencial: proteger la vida de las personas en situación de vulnerabilidad y cumplir con la obligación de no dejar ninguna vida a la deriva. Aún así, al igual que es de vital importancia trabajar con el equipamiento necesario, es igual de importante contar con un apoyo constante por parte de los ciudadanos para mantener nuestro proyecto vivo. La continuación de nuestra misión en el tiempo solo puede asegurarse con la ayuda de personas que creen y apoyan nuestros ideales.
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El barco de la ciudadanía
Desde su llegada al puerto de Barcelona, su puerto base, el Open Arms Uno abrió sus puertas al público y durante seis fines de semana, más de 5.000 personas han pasado por su cubierta y han podido conocer in situ las instalaciones de este barco, diseñado para realizar tareas de salvamento marítimo masivo, uno de los más grandes de Europa en su categoría.
Según las palabras de Oscar Camps, fundador de la ONG, durante la presentación oficial del barco, el pasado 8 de junio, “el ‘Open Arms Uno’ será embajador de la ciudadanía allá donde vaya”.
Una misión de vital importancia en un momento crucial
El Open Arms Uno zarpa y somos conscientes de que cientos de personas arriesgan su vida en el mar a diario huyendo de guerras, persecución y pobreza. No existen mecanismos gubernamentales estructurados de salvamento y los barcos humanitarios son la única presencia capaz de proteger la vida y los derechos en aguas internacionales. La espera para la asignación de un puerto seguro de desembarque está lejos de ser aceptable para la situaciones de emergencia que nos enfrentamos en el mar.
Aún así, en este momento histórico especialmente complejo, en un contexto político difícil con gobiernos europeos que siguen postergando decisiones inaplazables, la necesidad de tener un barco más seguro es una prioridad para nosotros. El Open Arms Uno significa salvar vidas, pero para garantizar que cumple con su misión en el Mediterráneo necesita del apoyo de la ciudadanía.
La lucha por la dignidad a la que todas las personas tienen derecho, vengan de donde vengan, pasa por crear una conciencia social de un problema que es muy real a pesar de que esté a cientos de kilómetros de nuestros hogares. Con vuestra ayuda, nuestro esfuerzo y compromiso cobran mucho más sentido.
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Gracias a todas y cada una de las personas que lo habéis hecho posible.
Buena proa y buena misión, Open Arms Uno.
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